La importancia de los paseos

     ¿Son importantes los paseos en la salud, el equilibrio y la felicidad de un perro?

Yo diría que es una de las cosas más importantes.

¿Cómo deben ser los paseos?
Un buen paseo no es sólo sacarlos para que hagan sus necesidades y corran tras la pelota.

Un buen paseo es una de las claves fundamentales para crear equilibrio y una relación sana con el animal.

Un buen paseo sirve para potenciar nuestra posición de líderes con respecto a ellos, fortalecer la salud (de ambos) y "quemar" energía, que, de otra manera, podrían liberar en forma de obsesiones o conductas peligrosas para el animal, otros animales o personas.

Es decir, debemos pensar que los paseos tienen dos finalidades importantes:

1- Hacer ejercicio, mejorando la salud y la forma física del perro, y

2- Potenciar la relación de líder/seguidor, que es muy importante si queremos equilibrio y armonía en nuestra relación con ellos.

Para conseguir ésto no basta con sacarlo a pasear a la vuelta de la esquina, o llevarlo al parque a tirarle la pelota. Jugar con ellos es una parte muy importante, y es muy agradable, pero siempre que hayamos cubierto antes sus necesidades de ejercicio y la de tener un líder a quien seguir. 

Un buen paseo empieza al salir de casa. Algo muy común es que el perro se ponga ansioso o nervioso cuando se da cuenta de que lo vamos a sacar, y que, en ese estado de nerviosismo, salga por delante de nosotros, tirando fuertemente de la correa. Así habremos salido de casa con el animal en un estado de agitación y ansiedad, y además dirigiendo el paseo.

Para nosotros puede que ésto no tenga mucho sentido y que no le demos importancia, pero en cualquier manada de animales, (y "nuestro" perro es un animal, aunque a veces nos cueste darnos cuenta), el que va  primero es el líder y los demás que van detrás son sus seguidores, y el líder no permite que le adelante ningún seguidor.

Así que si queremos empezar bien, creando las condiciones adecuadas para que sea un paseo tranquilo y agradable, debemos enfocarnos en mantenernos firmes y tranquilos nosotros, y conseguir que el animal salga en calma, y siempre por detrás nuestra. Para ésto es necesario tener paciencia, sobre todo al principio, hasta que lo convirtamos en un hábito.

(Mientras escribo ésto, acaba de pasar volando, cerca de aquí, una manada de ocas con la típica formación en "V", que es un gran ejemplo de la importancia de un líder que dirija los paseos...).

Una vez que hemos conseguido que el animal esté calmado y salga por detrás de nosotros, (sin hablarles ni gritarles), ya podemos salir a la calle y empezar el paseo con la mejor energía.

Continuaremos el paseo con la misma norma, nosotros por delante o a su misma altura, y dirigiendo el paseo. Nosotros somos los que decidiremos cuando parar y cuando seguir.
Para ello no recomiendo usar arneses, salvo si el animal es pequeño, ya que están hechos para que el perro tire, como en el caso de los trineos de perros, y nos va a resultar mucho mas difícil controlarlo, aunque parezca lo contrario.

Lo mas fácil y práctico es una correa sencilla atada lo más cerca posible a la cabeza del animal. De esta forma tirará menos.

En el momento en el que intenten adelantarnos los corregiremos con un firme tirón lateral, sin violencia, y nos centraremos en mantener nuestra energía firme y tranquila, parándonos si es necesario para respirar hondo. Recordar que los animales no siguen a un líder débil o inestable, y enfadarse o mostrar nerviosismo es una clara muestra de debilidad e inestabilidad para ellos. 

No llevaremos la correa con tensión, sino suelta y con nuestros brazos relajados, y sólo corregiremos con tirones cuando sea necesario.

No debemos permitir que gruñan, ni que se muestren agresivos con otras personas o animales, y corregiremos ésto en cuanto lo observemos. Estando atentos podemos aprender a reconocer las señales que nos muestran cuándo están en un estado de tensión o ansiedad, y así poder evitar comportamientos dañinos o problemáticos antes de que se produzcan. Corregiremos ésto con un firme tirón de correa que les saque de ese estado mental.

Los paseos son una parte muy importante en el equilibrio y la salud del perro, y además nos aportarán salud y energía a nosotros también.

Con tres paseos diarios de 30 minutos cada uno cubriremos sus necesidades de ejercicio y potenciaremos nuestra posición de líderes. Y ésto influirá enormemente en su comportamiento.

Con un poco de esfuerzo podemos evitarnos muchos problemas y disfrutar de una relación más sana y equilibrada con ellos.